julio 24, 2013

Frozen

El dilema de la exnovia lo resolvió la depresión profunda.

Como no quiero dañar cosas y como en este momento no hay nada en mi vida para cuidar, lo único que me interesa es que los demás estén bien. Y como ustedes, los que leen, suponen que no tiene sentido ser amigo de la exnovia, supogo entonces que el chico nuevo de la exnovia tampoco cree que tenga sentido. Luego, lo mejor que puedo hacer es alejarme mucho y esconderme mucho. Y dedicarme a encontrar motivos para levantarme de la cama y no llorar a cada rato.

Ir cortando lazos hasta que no esté atado a nadie, supongo. Ahí es que finalmente me voy a morir, al fin.

No hay comentarios.:

Lo más fresco

Photojournalism

Hoy todos estamos lamentando que Sebastiao Salgado ya no esté más. Pero al mismo tiempo estamos todos hablando de cómo está presente todo el...