¿Que cuál ha sido el momento más demente en un concierto? La respuesta es fácil. La segunda vez que vi a Iron Maiden, después de haber visto a Anthrax abriéndoles (mi español no es muy bueno pero mi metal es excelente, decía Scott Ian y no le faltaba verdad), comenzaron con el discurso de Churchill, Aces High y en algún momento sonó Wrathchild.
Los recuerdos son difusos y sólo sé que de repente estaba corriendo hacia el escenario. Corrí hasta que choqué con una masa de gente y comencé a saltar y empujar todo lo que estaba delante. Había quejas de "sin pogo, sin pogo" que fueron desoídas. Fue como si esa canción invocara un tsunami en medio del Simón Bolívar, conmigo encima de la ola más alta. Sólo recuerdo instantes en los que fui puro metal. Fui libre.
Cuando terminó la canción, volví junto a quienes habían ido conmigo, que estaban unos veinte o treinta metros más atrás. No recordaba haber corrido tanto. Me miraban estupefactos, como diciendo Qué carajos le pasó a este man. Cuando me vieron sonreir entendieron. Seguimos viendo el resto del concierto y fuimos felices.
Fui un maldito tsunami, jueputa.
julio 10, 2017
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Lo más fresco
Your illusion
Uno se sienta a recordar cosas de Brasil 2014 y, aunque ahora se ve lejano, sigue esa sensación de creer que lo que hicieron esos muchachos ...
-
El problema no es que lo hagas, el problema es el sentido... Mucho tiempo atrás, observando las cosas que me parecían inútiles, observé que ...
-
Cuando estábamos en clase con Andrés, él nos recordaba todo el tiempo lo importante que era caminar las montañas, recorrer los caminos, acam...
-
La gentrificación del campo. Las carreteras bien demarcadas y sin baches, una cosa impensada hace treinta años cuando se necesitaban para s...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario