septiembre 18, 2022

Negro

Lo pienso incluso al ponerle título al post. Usar la palabra negro se revisa dos y tres veces. El 99 por ciento de las veces se puede evitar. Viviendo en Bogotá es fácil elegir porque nada te confronta y no tienes que tomar decisiones. Saliendo de Bogota se hace más y más difícil.

Lee uno entonces columnas como ésta de Sorayda Peguero y se enreda aún más. No se trata de mí ni de mis miedos sino de la vida e identidad de otras personas. Yo navego dichoso la parte en la que otros me piden que les reconozca en su propia identidad, pero la correctitud política actual hace muy díficil saber quién está cómodo con que le diga de una forma u otra.

¿Le pregunto a alguien cómo prefiere que le diga? ¿Me arriesgo a que me mire como un pendejo por ponerme en ese plan? Les digo a todos sumercé y los dejo que me miren como un pendejo por hablar como rolo bobo? No es una cosa trivial. Hay lugares en los que una misma comunidad tiene miembros que se identifican como afrodescendientes, otros prefieren que los reconozcan como negros porque África es una vaina remota y lejana, otros no están en ninguna de esas dos versiones porque son de donde viven y no del cómo se ven.

Procurar cuidado a los demás pasa por lugares complicados.

Yo no sé nada. Sólo parece que todo está en construcción, justo ahora que, como a finales del siglo diecinueve, todos creían que ya no había nada nuevo bajo el sol.

septiembre 16, 2022

Unnamed

 Las personas se quejan porque otras personas hacen famosas a personas estúpidas. Las noticias como entretenimiento se alimentan de este continuo hilo de nimiedades populares y sus protagonistas. Hay personas que se graban reaccionando a lo que otras personas publicaron en alguna red social.

Juegan todos entonces a un entretenimiento cotidiano, incesante y por ello mismo ruidoso, en el que nada pasa cada día. Publicistas guiando el uso de medios orgánicos para que su marca sea mencionada, comentada, reconocida, compartida. Un gran ejercicio de vivir cada día para ser visible sin que eso deje huella alguna en la memoria. Montañas de dinero que se mueven cada día a las cuentas de unos cuantos seres que logran hacer más ruido que los demás, sin otro mérito que hacer ruido. Matracas de movimiento perpetuo.

Ser un sujeto desconocido parece entonces casi que anárquico. Contracultural. Ser una persona cualquiera sin aspiración de aparecer en una enciclopedia (o en Wikipedia). No salir en las páginas sociales, no salir en cuentas de otros de redes sociales, no figurar, no opinar. No demandar atención. Ser un guadual más junto al río.

Lo más fresco

Ranthought - 20241121

En el mismo sentido del otro post , hoy me cruzo con otra idea relacionada. Hace quince años, todos editábamos archivos de texto, creados co...