octubre 10, 2014

Coordinator

Otro cabezón

Esa noche, cuando llegamos al hostal, nos separamos y cada uno entró a su habitación. En la mía, además del chileno de apellido Riquelme, encontré un nuevo compañero profundamente dormido, roncando plácidamente en el camarote más cercano al baño. Cada ronquido era casi como un gruñido de guerra.

Como ya no era hora de encender la luz, me acomodé en mi cama y me puse los audífonos para poder dormir.

A la mañana siguiente, me levanté y pude ver con la primera luz que el nuevo compañero seguía durmiendo, sin roncar, con el largo pelo negro cubriéndole la cara. Más adelante, mientras preparábamos los pancakes, el compañero de pelo largo llegó a la cocina. No medía más de 1.70 y efectivamente lucía un largo, liso y brillante pelo negro. Rasgos asiáticos y un bigote poco llamativo. Llevaba un traje gris, camisa blanca y una corbata oscura, plana. Llevaba consigo un portafolios negro y maltrecho que dejaba ver el abuso que había sufrido.

En principio no se acercó. Había otra persona en la cocina además de nosotros dos y con ella habló brevemente. Esa persona se fue poco después y él no tardó mucho en acercarse y comenzar alguna conversación casual. La masa de los pancakes, la fruta, dónde están los platos, hace cuánto están en la ciudad.

Sonaba la radio pero nadie estaba prestando atención. Me sorprendí a mí mismo llevando la conversación con fluidez y conociendo a este señor, estadounidense y que creo que se llamaba Jim, conociendo sus quehaceres. Era un coordinador regional en la costa este para grupos de vigilancia y protesta. Viajaba por la costa este reuniendose con los grupos de cada ciudad. Se tomaba muy en serio su quehacer, como debía ser.
-Ustedes saben, estas multinacionales que todo lo quieren dominar- comentó al hablar de aquellos a los que enfrentaba cada día. Éramos jóvenes en un hostal, así que asumió que comprendíamos todos los matices de su lucha.

Salió a su reunión y no volví a verlo. Seguro ese día salió rumbo a otra ciudad. A otra lucha. Otro día.

No hay comentarios.:

Lo más fresco

Your illusion

Uno se sienta a recordar cosas de Brasil 2014 y, aunque ahora se ve lejano, sigue esa sensación de creer que lo que hicieron esos muchachos ...